libourne femmes coquines La Asamblea Local de IULV-CA de Dos Hermanas, ante los acontecimientos que vienen ocurriendo últimamente en el seno de nuestra organización, quiere dar a conocer a la militancia y órganos superiores la siguiente resolución.

http://la-saponniere.fr/categorie-produit/bougies-vegetales/?filter_parfums=notes-poudrees Consideramos irrenunciable la defensa de Izquierda Unida como movimiento polí­tico y social, donde la pluralidad, el consenso, y la participación de todas y todos en el trabajo y en las decisiones, sean nuestras señas de identidad y no meras palabras vací­as que ocupan los discursos y se contradicen con las prácticas. Entendemos, por tanto, que cualquier proceso de renovación o refundación del proyecto debe tener en cuenta estos principios fundadores. Nuestra apuesta por lo rojo, verde, violeta y blanco no puede acabar convirtiéndonos en un reducto monocolor que, bajo la excusa de distinguirnos de los ecos, termine por desahuciar también las voces.

Creemos que cualquier propuesta que retorne al centralismo nada tiene que ver con los postulados de una izquierda democrática, participativa y abierta a la militancia de base. No podemos defender en nuestros pueblos y ciudades lo contrario que aplicamos a nivel interno. No cabe hablar de una Izquierda Unida vinculada a la sociedad y excluyente con nuestros propios compañeros y compañeras. La soberaní­a de las asambleas nunca puede estar condicionada por las decisiones cupulares. En este sentido, cualquier proceso de elección de representantes debe partir desde abajo hacia arriba y nunca a la inversa. Tanto la designación de candidatos y candidatas a los diferentes comicios electorales, como la de órganos internos, deben ser decidida en los respectivos ámbitos territoriales, y en ningún caso, la interpretación interesada de los estatutos debe ser utilizada para silenciar la voz de las asambleas ni para propiciar la ocupación antinatural de cargos públicos.

Estamos convencidos de la necesidad del proyecto al que pertenecemos, que hunde sus raí­ces en la alternativa al modelo neoliberal y al bipartidismo. Queremos ser una fuerza independiente, moderna, que no rehuye el debate ni la transformación social desde la realidad cotidiana, como hemos demostrado y demostramos allí­ donde estamos presentes. Por eso no podemos perder el tiempo en luchas intestinas que dan al traste con el esfuerzo diario de quienes nos representan en las instituciones y están permanentemente luchando en la calle. Basta de exigir ética, renovación de sillones y apertura siempre para los demás. Nuestras sedes deben ser espacios habitables, espacios de debate desde el más profundo respeto, no lugares para el desencuentro. Si verdaderamente creemos en la construcción de otro mundo posible, no contribuyamos a la destrucción del único instrumento polí­tico y social que disponemos para conseguirlo: Izquierda Unida.

Aprobada por unanimidad el jueves, 8 de noviembre de 2007.